La muerte no entiende de idolatrías, se sabe que nos llega a todos pero siempre que nos toca de cerca es difícil aceptarla. Esta semana comenzó con una trágica noticia: el fallecimiento de Heriberto "el chileno" González, el que le hizo el gol a Boca con la camiseta de Alianza. En realidad marcó cientos de goles más, era un goleador nato, en el área tenía la frialdad que sólo los elegidos manejan, pero ninguno de sus tantos goles tienen la importancia como la de esa tarde, aún hoy sigue siendo el único gol neuquino marcado en primera división en esta provincia. La noticia pegó duro entre los amantes del fútbol regional. Los que vimos esas épocas doradas, sentíamos que los jugadores eran como sùperhèroes (o súpervillanos si es que jugaba con otros colores) pero sea cual sea el caso parecía inmortales. Esa ilusión de niño generaba por la exacerbada admiración que en este momento nos sacude y nos retrotraen a esas felicidades futboleras que atesoramos en lo más recóndito de nuestras emociones.
Desde El Valle Futbolero queremos imaginarnos al Chileno Heriberto González entrando a los potreros del paraíso. Seguramente De Carli y el Tiburón Silva ya habrán tramitado ante San Pedro el permiso para que el chileno pueda usar la camiseta de Alianza. Allí entrará el ángel celeste al área, dominando la pelota mientras en el mismo movimiento se perfilará hacia el arco para definir rápidamente ante la salida del arquero y eternizarse en la alegría de un festejo de gol. Mientras acá abajo, el agradecimiento y la admiración te recuerdan en forma de lágrimas, lágrimas de emoción que perdurarán por siempre.
Texto: Charly Quintana.
Foto del diario RN
muchas gracias por estas palabras tan lindas. Soy su hija más chica, y en los 19 años que compartí con él siempre vi lo muy querido que era por sus allegados de cutral có. Tuve la oportunidad de conocer a algunos, no a todos, pero hablaban de mi papá de una manera muy especial. Un artículo muy lindo y palabras muy ciertas. Simplemente mil gracias por recordarlo y más por idolatrarlo por lo que más amaba hacer. Formó una familia muy unida y maravillosa, simplemente un orgullo como persona, como jugador y como padre. Gracias en serio por recordarlo así.
ResponderEliminarMuchas gracias por tan bellas palabras.. No habia visto este articulo hasta hoy. Me llena de emocion y orgullo. Tanto como ese gol que le marco a boca. Fue un buen hombre. Gran esposo y padre. Aun duele su ausencia pero lo recordamos con amor el mismo que el nos brindo siempre a su flia.
ResponderEliminarQue pedazo de jugador y muy buen laburo periodístico.heriberto era un distinto sin dudas
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