Si usted es futbolero entenderá lo que digo, todos los sonidos nos hacen recordar a un partido. Bueno, está bien, a veces exagero, no todos los ruidos pero hay algunos que al menos despiertan el instinto futbolero. Uno de ellos es el viento, si estoy distraído y escucho su eco inevitablemente pienso que es un grito de gol lejano, cuando me doy cuenta que se prolonga advierto que es el viento.
Si el viento llega desde Zapala realmente tiene ese sonido porque trae el eco de goles memorables, como los de Miguel Caracoche. Porque las emociones que provocaron esos goles permanecen en los corazones canarios. Con Miguel a la cabeza Unión de Zapala vivió sus épocas doradas, fue campeón del Petit y en una histórica final derrotó a Centenario clasificando al Torneo Regional. En 1980, con un gol de Miguel Caracoche venció a Independiente Rivadavia de Mendoza, ese 17 de febrero, el canario era puntero de la zona 3. Dicen que nunca se vio tantas sonrisas en Zapala como la mañana siguiente.
Miguel era un líder dentro de la cancha, fue verdugo de todos los arqueros de la zona y le hizo hacer cientos de goles a Rubén Bruno. Pero personalmente nunca se creyó ídolo, el se sentía un vecino más en una ciudad que lo adoptó como hijo propio. Sin embargo, pese a su humildad, le dio tantas alegrías al hincha canario que el agradecimiento será eterno. Por eso no lo dude, si el viento viene de Zapala, seguro trae goles, goles de Miguel Caracoche.
Miguel jugando en la selección de Lifune |
cuanta alegria volver a esas tardes de domingo, ver jugar a miguel, pelusa, quiroga y otros tantos,..luis a seguel de san rafael mendoza
ResponderEliminarMiguel Caracoche era fácil de identificar en la cancha y afuera también de grandes bigote y una buena estatura..excelente físico y mejor jugador digno de apreciar...exquisito jugador...
ResponderEliminarTe Amo tío!!
ResponderEliminarGran persona excelente jugador y entrenador un gran abrazo Nilo Narambuena
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